viernes, 19 de diciembre de 2014

La limpieza del coche: 'do it yourself'



La limpieza del coche: 'do it yourself'

Un vehículo sucio o en mal estado no es, precisamente, la mejor carta de presentación para su propietario. Pero, además, mantener el vehículo limpio no es sólo una cuestión de higiene, sino de seguridad y hasta de conservación. El polvo deteriora la carrocería (se raya con más facilidad) y otros elementos como las cubiertas, las llantas y hasta los discos de freno, mientras que los excrementos de ave son mucho más dañinos de lo que se pueda pensar para la pintura exterior.

Los lavados a presión y los túneles de lavado son una buena opción para el exterior, pero no hay que descuidar el interior del vehículo. Además, con la situación económica actual, el 'do it yourself' o 'hazlo tú mismo' es una opción económica y anticrisis que ha ido ganando adeptos. De hecho, cada vez son más los conductores que prefieren encargarse personalmente del lavado tanto interior como exterior de su coche.

El mercado ofrece, actualmente, infinidad de productos de calidad, diseñados, específicamente, para la limpieza de vehículos (carrocería, cristales, tapicerías, etc.). Son económicos y muy prácticos, tanto para su uso frecuente como para aplicaciones más esporádicas. A continuación recogemos una lista de los productos más populares y que ofrecen mejores resultados.

Carrocería. Nunca está demás contar con un gel específico que elimine los arañazos. Existen diferentes variedades en el mercado y a precios muy económicos. Para lavar la carrocería hay que emplear un champú concentrado para vehículos. También puedes optar por adquirir un pack de limpieza, que incluye los productos necesarios para una acabado impecable. Para un resultado profesional, el elemento clave es la espátula seca auto.

Bayetas, esponjas y gamuzas de coche. Una bayeta de microfibra anti vaho ayuda a que el parabrisas (por la parte interior), los espejos y las ventanas no se cubran de vaho, mejorando así la visibilidad y, por tanto, la seguridad vial. En este sentido, otro producto recomendable es una esponja antivaho forrada con piel natural. Existen también balletas de microfibra o esponjas elaboradas íntegramente con algodón. Más artículos interesantes dentro de este apartado son las balletas limpiacristales y aquellas que son a su vez abrillantadoras y secadoras.

Tapicería. Si la tapicería es de piel, siempre es una buena opción tener a mano un gel limpiador y conservador de piel o las prácticas toallitas limpiadoras específicas para ese material, que pueden salvarnos de más de un apuro, sobre todo, cuando se tienen niños pequeños. Si hablamos de otros materiales, existen espumas quita olores y también toallitas limpia superficies.

Cera de coche. Este producto contribuye a proteger la carrocería de agentes externos. Hay que aplicarla de vez en cuando y siempre que la carrocería esté perfectamente limpia.

Neumáticos. Son probablemente los más castigados por la suciedad y el uso diario. Existen productos limpia llantas, pulidores de metales y cepillos especiales, así como espumas limpia neumáticos.

Limpiasalpicadero. Su limpieza está directamente relacionada con nuestra comodidad al volante. Asimismo, un salpicadero con exceso de polvo puede dificultar la conducción a aquellas personas que padezcan alergia a estas partículas. Su limpieza es sencilla con productos muy económicos que, además, contienen agradables aromas (limón, fresa, pino, etc.).

Cristales. Toallitas limpiacristales o las específicas antimosquitos. Tener una rasqueta limpiacristales (cuestan menos de tres euros y le daremos un uso frecuente) posibilita un acabado profesional con un buen producto lavaparabrisas. También existen geles repelentes de lluvia para vidrio.

Ambientadores de coche. El uso de perfumes es tan antiguo como la humanidad y nuestro vehículo no podía ser menos. Son baratos y los hay en diferentes formatos, aromas e intensidades.




jueves, 11 de diciembre de 2014

Dime qué color de coche eliges y te diré cómo eres



Dime qué color de coche eliges y te diré cómo eres


¿Por qué nos inclinamos por un color y no por otro a la hora de comprar un coche? ¿Siguen las tonalidades de los vehículos las tendencias y modas? ¿Qué representa la elección de un tono específico? ¿Influye la cultura en nuestro criterio a la hora de escoger la gama? ¿Cuál es el color más vendido en todo el planeta?

Efectivamente, la elección del color de un vehículo aporta información relevante sobre su conductor. Nos habla de sus gustos personales, carácter, edad, sexo e incluso estatus social.

Uno de los colores más populares, el blanco, se asocia a la luz y al inicio. Normalmente, suele ser el color escogido por conductores optimistas, amantes de nuevos proyectos y la seguridad al volante.

Por su parte, el negro representa el poder, la elegancia, el prestigio y el misterio. Es un tono que goza de gran popularidad entre las personalidades más serias y con más años de experiencia al volante.

El gris o plateado representa el equilibrio, la estabilidad y la armonía. Los conductores que lo eligen suelen ser personas cerebrales, creativas e independientes.

Conductores seguros
Otro factor a tener en cuenta en lo que al color se refiere es la seguridad que se asocia al mismo. No faltan estudios sobre los tonos con más probabilidad de verse involucrados en accidentes o de ser más seguros, aunque en ocasiones son contradictorios. El Centro de Investigación de Accidentes de la Universidad de Monash de Melbourne (Australia), publicaba que los coches blancos son los más seguros, frente a los de color negro, que se ven implicados en un 12 por ciento de los siniestros, y los de color gris, con un riesgo del 11 por ciento.

Por el contrario, la Universidad de Auckland, en nueva Zelanda, presentó un estudio que determinaba que los turismos marrones, negros y verdes (en este orden), son la elección menos segura. Los resultados de esta investigación también revelaban que los coches gris plata tienen una probabilidad de accidente un 50% menor, en comparación con los vehículos de color blanco, rojo o azul.

La tendencia dominante
Con respecto a los gustos mayoritarios, hay que tener en cuenta que casi una tercera parte de los vehículos vendidos en Europa durante el último año han sido pintados en blanco.

Además de los gustos personales y las tendencias del mercado, en esta decisión también podría influir la economía, ya que la mayoría de las paletas gratuitas de las marcas incluyen el blanco, el rojo y el negro en los acabados sólidos (no metalizados).

Colores por países y continentes
En Estados Unidos el blanco es también el color más deseado, con un 20 por ciento del total. Negro y plata empatan con un 17 por ciento cada uno.

Rusia se rinde al plata -un 30 por ciento- con el negro y el rojo alcanzando un 14 por ciento cada uno. Destaca la popularidad del verde -13 por ciento- y del azul -12 por ciento-, con unos porcentajes elevados respecto a otras regiones del mundo.

En Asia, el blanco es, de nuevo, el que más gusta a los compradores -28 por ciento- y el plata es el dominante en la mayoría de los países asiáticos -China, Japón y Corea-.

En el continente americano, el blanco y negro triunfan a partes iguales en las preferencias de los conductores de México. En Brasil el que más gusta es el plata, al igual que ocurre en Colombia.

Con todo, el blanco se ha consolidado este año 2014 como el color del automóvil más popular entre los consumidores de todo el mundo.

lunes, 8 de diciembre de 2014

Cuidados para la batería del coche en invierno



Cuidados para la batería del coche en invierno


El frío puede tener efectos indeseados en nuestros vehículos. Uno de los elementos del motor que más puede resentirse con la llegada del invierno es la batería, que es el acumulador que proporciona la energía eléctrica para el motor de arranque.

El arranque de un motor de combustión requiere, en un breve espacio de tiempo, corrientes muy elevadas de entre cientos y miles de amperios. La batería ha de cumplir este requisito también en invierno a bajas temperaturas. Además el voltaje eléctrico no puede reducirse considerablemente durante el proceso de arranque. Por eso las baterías disponen de una resistencia interior pequeña.

Con todo, los conductores deben estar preparados ante todos los posibles inconvenientes que se suelen presentar en esta época del año, ya que la avería más recurrente en los coches es el fallo de la batería. De hecho, según el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA), un 23% de las averías de invierno vienen por fallos en las baterías. Pero lo peor puede que no sea esto, ya que hay muchos conductores que, debido a la crisis, evitan pasar por el taller con el fin de ahorrarse los costes de revisión, por lo que el riesgo de avería puede ser mayor.

El duro invierno
La batería de arranque disminuye su capacidad con la disminución de la temperatura. Hay diferentes sistemas disponibles en el mercado para evitar una temperatura demasiado baja así como para elevar la temperatura. Al llegar el invierno se debería comprobar si la capacidad de la batería es suficiente para el arranque a temperaturas bajo cero grados. Las baterías terminan su ciclo normalmente en invierno, ya que la pérdida de capacidad es mayor a bajas temperaturas y a menudo no pueden proporcionar un arranque prolongado a temperaturas reducidas. A -20 grados centígrados solo esta disponible la mitad de la capacidad normal. Al mismo tiempo, la baja temperatura del aceite del motor hace el proceso de arranque más difícil. Por eso en lugares con inviernos muy duros se desmonta la batería durante la noche para depositarla en un cuarto caliente.

Y es que, según datos proporcionados por socios de la CEA, durante el invierno de 2011-2012 se realizaron 211.655 asistencias a conductores, de las cuales un 78,5% fueron causadas por averías en sus vehículos. Esto es debido a que las bajas temperaturas, ligadas a un mal mantenimiento por no acudir al taller regularmente, imposibilitan el arranque de la misma. Además, si este elemento del motor cuenta con más de tres años de antigüedad, a pesar de no haber ocasionado ningún problema durante el verano, corre el riesgo de quedar inhabilitado.

Consejos para su buen mantenimiento
Lo ideal es comprobar la carga de la batería antes del invierno y cambiarla, si fuera necesario. Las principales averías que aparecen durante estas fechas son fáciles de prevenir con revisiones periódicas en el taller y tomando pequeñas precauciones. El invierno estropea los coches, sobre todo la batería, pero para no tener que cambiarla antes de tiempo, es necesario no dejar luces encendidas y que el coche 'duerma' resguardado de la humedad.

Asimismo, es recomendable llevar un juego de pinzas por si acaso el coche falla en el peor momento. Saber cómo poner las pinzas en la batería para arrancar el coche es clave, ya que así se evitarán problemas. Los mecánicos de su taller de confianza pueden ayudarle y explicarle, paso a paso, cómo realizar la operación de forma sencilla y eficaz.

Además, conviene realizar un mantenimiento sencillo para que la batería cumpla su periodo regular de vida de cuatro o cinco años. Esto incluye tener en cuenta el estado del alternador, ya que si éste no genera suficiente energía, no recargará correctamente la batería.